Hay independencia de la familia de origen, iniciando la formación de una identidad e intimidad de pareja.
Se deben adaptar a los roles y tareas de una casa y generar patrones de solución de conflictos.
Se da el proceso de noviazgo, matrimonio y pareja sola.
Se da la aceptación de los nuevos miembros en el sistema familiar, desde el nacimiento hasta que los niños tienen seis años.
Hay dificultad de los padres para controlar las conductas de los hijos, se refleja en un cansancio constante.
Hay una transición de una estructura diádica a una tríadica, se da la vinculación afectiva madre-hijo.
Se debe ayudar a la autonomía de los hijos, iniciando los procesos de socialización.
Se dan crisis como el sentirse abrumados por la responsabilidad de ser padres.
Aparecen tensiones entre los roles laborales y familiares de los padres.
Se da la identificación de modelos y roles sexuales.
Abarca desde los 6 a los 13 años del hijo mayor.
La familia apoya el desarrollo de la identidad personal.
La escuela se inserta como un nuevo ecosistema que apoya la apertura al mundo extrafamiliar, se da la consolidación y estabilización laboral.
Muchas veces las crisis de la familia se dan por la sensación de sentirse evaluada por la escuela en términos de crianza y socialización.
La familia incrementa la flexibilidad en los límites para generar independencia en los adolescentes (de los 14 años hasta 20 años del hijo mayor).
Las crisis más recurrentes para los padres son la preparación para la adultez, para el adolescente, la aprobación de los padres.
Dificultad para aceptar la normalidad o corregir las conductas disruptivas del hijo.
La familia funciona como plataforma de lanzamiento.
El hijo abandona la casa de los padres, lo que requiere permitir la independencia total de los hijos, su elección de pareja y vocacional.
Los hijos temen las consecuencias de su partida en la relación de los padres.
Se da el fin de la actividad laboral de la pareja inicial.
Se deben asumir roles, como el ser abuelos.
Posteriormente, se da la muerte de uno de los miembros de la pareja.
Surge el enfrentamiento a las pérdidas: juventud, salud, vitalidad, trabajo.