Núcleos
La raíz craneal se origina a partir de los axones de células nerviosas del núcleo ambiguo, el cual recibe fibras corticonucleares de ambos hemisferios cerebrales.
La raíz craneal se origina a partir de los axones de células nerviosas del núcleo ambiguo, el cual recibe fibras corticonucleares de ambos hemisferios cerebrales.
La raíz espinal se conforma por axones de células nerviosas del núcleo espinal, situado en la columna gris anterior de la médula espinal en los segmentos cervicales superiores. Recibe fibras corticoespinales de ambos hemisferios cerebrales (Splittgerber, 2019). Desde este núcleo, emite sus fibras hacia el exterior atravesando el funículo lateral y emergiendo en el surco espinal del nervio accesorio, donde se combina para formar la raíz espinal del nervio. Esta raíz asciende a través del canal vertebral, ingresa a la cavidad craneal a través del agujero magno y se fusiona con la raíz craneal, para dar lugar al nervio accesorio propiamente dicho, el cual posteriormente sale a través del foramen yugular (Sandoval, 2017).
El trayecto del nervio accesorio comienza después de atravesar el foramen yugular, donde se divide en un ramo interno y un ramo externo. El ramo interno se une al nervio vago y se distribuye junto con él en los músculos faríngeos y laríngeos. Mientras tanto, el ramo externo se ramifica en los nervios que inervan los músculos trapecio y esternocleidomastoideo. Dentro del agujero yugular, el nervio accesorio se fusiona con una vaina dural que contiene la raíz craneal del nervio accesorio, aunque no hay intercambio de fibras entre ellas. Al abandonar el cráneo, el nervio cruza la apófisis transversa del atlas y penetra en el músculo esternocleidomastoideo, junto con ramos de las raíces C2 y C3 del plexo cervical. Posteriormente, emerge en el borde posterior del esternocleidomastoideo y cruza el triángulo posterior del cuello para alcanzar el músculo trapecio. A medida que atraviesa el trapecio, se acompaña por ramos de las raíces C3 y C4 del plexo cervical (Mtui et ál., 2012).
El nervio accesorio cumple un papel crucial en la función motora del músculo trapecio, encargado de la elevación del hombro, y del esternocleidomastoideo, el cual contribuye a la rotación de la cabeza. Además, proporciona inervación tanto para las fibras musculares extrafusales como para las intrafusales de estos músculos.
Origen y distribución del nervio accesorio: a) Núcleo ambiguo; b) Raíz craneal del XI; c) Núcleo espinal del XI; d) Raíz espinal del XI; e) Músculo esternocleidomastoideo; f) Músculo trapecio.
Cuando el nervio accesorio se lesiona, se presentan parálisis en los músculos trapecio y esternocleidomastoideo. La afectación del músculo trapecio provoca la incapacidad de elevar el hombro del lado de la lesión, lo cual se traduce en una caída del hombro. Por otro lado, la parálisis del esternocleidomastoideo resulta en la imposibilidad de rotar la cabeza hacia el lado opuesto de la lesión. Estas manifestaciones clínicas son características de una lesión en el nervio accesorio, y pueden tener un impacto significativo en la movilidad y funcionalidad del paciente (Sandoval, 2017).